Y el videojuego se hizo arte

GTA IV Ayer ocurrió un hecho insólito en España. Un videojuego acaparó la portada de un periódico de tirada estatal. El diario Público dedicó su portada del 30 de Abril al polémico GTA IV y, para sorpresa de muchos, no fue para criticar o demonizar su aparición, sino para alabarlo y equiparar la industria del videojuego a otras como el cine y la música. Sin complejos. No en vano el mercado de los videojuegos ya ha superado a estos dos mercados.

Basta comprobar cómo el juego de Rockstar ha conseguido vender 609.000 copias (que se dice pronto) en su primer día a la venta en Reino Unido. En España, aunque las cifras no serán tan espectaculares, a buen seguro será desde su primera semana un auténtico Best Seller.

Seguramente, buena parte del mérito lo tengan a partes iguales Rockstar, Microsoft y Sony, que están dedicando más recursos que nunca en la promoción de este videojuego. Los artículos que Público dedica al juego califican a GTA IV como ocio para adultos. No podría estar más de acuerdo. Y es que por fin en un medio generalista se habla sin reparos de la violencia en un videojuego, un videojuego para adultos.

Sí señoras y señores, padres y madres: hay videojuegos para adultos. Así que por favor, pónganse en su papel de progenitores responsables y controlen a qué juegan sus hijos. Ya basta de escurrir el bulto, ya basta de mirar hacia otro lado, y ya basta de culpar a los padres del «amigo ese».

Ojo también al papel que tienen las tiendas especializadas y los centros comerciales, en mi opinión los grandes responsables de la criminalización que sufren los videojuegos. Señores, en la caja de cualquier videojuego aparece claramente la edad mínima recomendada, así que no vendan un GTA IV a un menor, informen a los padres, en definitiva sean responsables.

Pero al final, todo este boom mediático que está teniendo el juego de Rockstar, no sería tal si GTA IV no fuera un juego excelente. No sólo gráficamente, sino lo que es más importante, argumentalmente. Estamos ante un juego que ha sido capaz de abrir los ojos a muchísima gente, entre ellos a algunos periodistas (¡por fin!). Y la historia y el argumento tienen mucho que ver aquí. GTA IV es un espectáculo casi cinematográfico, y quizá sea esto precisamente lo que ha hecho que el juego cale entre gente que rara vez presta atención a los «juegos para maquinitas».

Quién sabe si habrá un antes y un después de la salida de GTA IV. Es posible que sólo sea un primer paso hasta conseguir la ansiada naturalidad cuando sale a la venta un juego para adultos. En cualquier caso, bienvenido sea GTA IV.

5 Replies to “Y el videojuego se hizo arte”

  1. Me parece perfecto que, por fin, se reconzca el lanzamiento de juegos para adultos en el ámbito de los videojuegos; pero creo que llega tarde.

    Las escuetas noticias que se dedicaron a Manhunt no fueron precisamente para decir que era un juego para adultos, si no para dejar por los suelos la poca credibilidad que al parecer nos queda.

    Además, veo detrás de esa portada y de todas las noticias a página completa que han habido sobre el GTA IV más dinero que interés… pero espero equivocarmen.

  2. Jolupa, estoy de acuerdo contigo, pero lo importante no es si detrás hay dinero o no, sino que al final la gente se quede con que hay videojuegos para adultos y es algo perfectamente natural.

    Si para conseguir eso las empresas han de poner pasta, pues bienvenida sea. Sectores como el cine o la música, han hecho y hacen lo mismo. Para mí, que las empresas de videojuegos defiendan su producto es signo de madurez en la industria.

  3. No creo que por que un par de periódicos digan que son «juegos para adultos» cambie en algo el panorama. Siempre han sido juegos para adultos y es tan simple como el que lo sabe lo sabe y al que no le interesa saberlo pués simplemente no le interesa.
    ¿Como integrarlo dentro de la naturalidad? Deberían de multar a los establecimientos que vendiesen juegos con el +18 a menores, como «ya hacen» con el tabaco y el alcohol.

    En fin :X

  4. El problema es que muchas veces son los padres los que te «obligan» a venderle el juego al hijo menor. Me paso algo parecido trabajando en Fnac donde un chaval se nego en venderle el juego a un menor y vino el padre con malas ganas y casi buscando camorra… aunque con un padre así no creo que al niño lo que más le impacte sea el juego, la verdad.

  5. Es lo más preocupante, la chulería y pasotismo de algunos padres, y como bien dices jolupa, es mucho más terrible eso mismo. Si los supuestos garantes de la educación de sus hijos no se preocupan de ellos, pues mal va la sociedad.

Deja una respuesta